Postergar ¿Por qué si sé que lo tengo que hacer, no lo hago?


Si prefieres dormir hasta tarde un día más, si decides ver un capitulo más de la serie u otra película en el sistema on demmand, o entrar en tus redes sociales y navegar algunas horas o simplemente ver pasar el tiempo en lugar de hacer tu rutina que elegiste para bajar de peso, o escribir el artículo al que te comprometiste o iniciar ese reporte del trabajo que te pidieron. Es posible que tengas el hábito tóxico de postergar.

Las personas que postergan sus actividades, aunque muchas veces hayan escuchado el viejo refrán de la abuela: “no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy” prefieren preguntarse: ¿Para qué hacer hoy, lo que puedo hacer mañana? Y así, deciden pasar el rato haciendo cosas placenteras al corto plazo, evitando realizar tareas que sin duda alguna a la larga, les darán mayores satisfacciones.

Es normal que la persona que acostumbra postergar sus actividades, encuentre este estilo de vida gratificante a corto plazo, sin embargo, a largo plazo no será positivo ni en su entorno personal, ni en el laboral, ya que esta forma de vida no sólo aumenta los niveles de estrés, sino que puede llevar a tener un desempeño más bajo, frenar el crecimiento en general y por ende dañar la autoestima y reputación profesional.

Si entras en cualquiera de los supuestos anteriores y quieres darle vuelta a tu actitud pero no sabes cómo. Te comparto estos consejos para que dejes de postergar y pongas manos a la obra para realizar las acciones que te lleven a lograr tus objetivos y cumplir tus sueños.

1.- Enlista tus tareas y asigna un tiempo para realizarlas.

Saber lo que tienes por hacer, ayuda a priorizar cada tarea e identificar cuál o cuáles son las que pudieras hacer después y establecer un método para realizarlas en tiempo y forma.

2.- Realiza primero las tareas que menos te gustan.

Por lo regular al iniciar el día tenemos mejor actitud, más energía y estamos menos saturados, por lo que dedicar tiempo a realizar las tareas que menos te gustan bajo estas condiciones, te ayudará a ser más productivo y al terminarlas te liberarás del estrés que te producen.

3.- Date incentivos.

Si te esta costando trabajo dejar de postergar alguna actividad, ayúdate a comenzar definiendo un premio por realizar esa actividad y terminarla en tiempo y forma. Puede ser lo que sea que te motive, salir a algún lugar, ver una película, una rica cena, etc. Lo que hagas después de terminar eso que postergabas, te dará tranquilidad y lo disfrutarás más.

4.- Atrévete a comenzar.

El primer hecho para realizar una actividad es ponerte en acción, así que cuando identifiques algo que normalmente postergarías, solo atrévete a comenzar y verás que será más fácil terminarlo. Por ejemplo, si tienes que escribir un ensayo comienza a escribir un párrafo y después seguro estarás escribiendo una cuartilla y cuando te des cuenta habrás terminado el documento. Solo es cuestión de comenzar.

5.- Nunca es tarde para empezar.

Si alguna vez pensaste que es muy tarde para comenzar algo que traes en mente, estas equivocado. Solo es cuestión de hacerlo y entender que no se pueden controlar todas las variables o saber todo sobre un tema. Así que simplemente hazlo, ponte en marcha, seguramente en el camino podrás ir modificando la estrategia. Pero por lo pronto: ya comenzaste.

Poner en práctica estos consejos a mi me ha ayudado a evitar la procastinación y seguro que si tú lo intentas, lo lograrás.

Comenta y comparte tus experiencias! Y si te gustó el artículo, compártelo, así más personas sabrán cómo dejar de postergar y ponerse en acción para lograr sus objetivos y alcanzar sus sueños. ¡Hasta la próxima!

Escrito por:

Luis Enrique Cienfuegos Velasco.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Tiempo de viajar #ViveLaExperiencia

Si te caes levántate, pero levántate fortalecido.